Los sábados nos reunimos toda la familia a comer en casa de mi madre. Yo me encargo siempre del postre, y la semana pasada mi sobrino pequeño Hugo, me preguntó si sabía hacer phoskitos. Le dije que sí y pensé, "bueno, un brazo de gitano relleno y bañado en chocolate", pero ¿como es la crema?
Me puse a investigar por internet y encontré muchas recetas con un relleno de crema de mantequilla o nata y nada más. Me pareció muy simple hasta que encontré la receta de Kanela y limón. En este blog el relleno es una crema de nata y leche condensada.¡ Leche condensada!Ya no busco más, esta es la mía. Sale una cremita dulce, dulce. Si no os gusta la leche condensada, os recomiendo montar nata con azúcar y rellenar con eso. Pero este relleno, es delicioso.
Con la cobertura tuve un problema, en la receta original se hace con chocolate negro, pero cuando lo intenté, era demasiado espeso (siguiendo sus indicaciones, eh!) que no había manera de bañar los phoskitos bien, se quedaba muy fea la cobertura, así que probé con chocolate con leche y mucho mejor. Como ya tenía bañados unos pocos en chocolate negro, pues hice mitad y mitad.
Otro cambio importante es el bizcocho. El de Kanela y limón debe estar riquísimo, pero era muy elaborado, entonces pensé en una receta de brazo de gitano que yo tenía mucho más simple y rápido. Os la recomiendo, es muy fácil y queda bien.
En fin, que de la receta original, ha quedado en un mix de cambios que no quedan nada mal. Espero que os guste.
INGREDIENTES:
PARA EL BIZCOCHO:
4
huevos
120 gr
de azúcar
120 gr
de harina.
PARA EL RELLENO:
120 ml.
de nata para montar
80 gr
de leche condensada
1
cucharadita de miel.
PARA LA COBERTURA:
200 gr
de chocolate negro
200 gr
de chocolate con leche
80 gr
de mantequilla
50 gr
de agua
PREPARACIÓN:
Precalentamos
el horno a 180º y hacemos la masa mientras.
En
el vaso poner la mariposa y blanquear los huevos con el azúcar 6 minutos, 37º velocidad 3.
Al
acabar volver a poner 6 minutos más sin temperatura a la misma velocidad.
Cuando
acabe, echar la harina y mezclar 15 segundos a velocidad 3.
Volcar
la mezcla sobre una bandeja de horno con papel de hornear y extender hasta
formar un rectángulo. Hornear unos 10 minutos, hasta que lo veamos dorado pero
no demasiado.
Al
acabar, sacamos y ponemos sobre un paño húmedo sin quitarlo del papel de horno
y enrollamos. Dejamos templar.
Montamos
la nata con la mariposa unos 2 minutos a velocidad 3, vigilando constantemente
que no se nos convierta en mantequilla. Por el bocal echamos la leche
condensada y la miel poco a poco mientras se monta la nata.
Con
esta crema, untamos el bizcocho que debe estar frío y volvemos a enrollar. Lo
metemos a la nevera una hora.
Ya
frío, cortamos en rodajas de un dedo más o menos y ponemos sobre una rejilla
para bañar con el chocolate. Salen 18 phoskitos, pero desechamos los dos
extremos.
Derretimos
el chocolate negro con 40 gr de mantequilla y 25 de agua. Al micro un minuto
más o menos hasta que esté derretido y bañamos la mitad de las rodajas que
hemos cortado.
Con
el chocolate con leche hacemos lo mismo y bañamos los otros phoskitos.
Metemos
a la nevera media hora y damos la vuelta con cuidado y volvemos a bañar en
chocolate. A la nevera hasta la hora de comérselos.
Ponemos los huevos en el vaso.
Añadimos el azúcar y blanqueamos.
Ponemos la harina y lo mezclamos todo.
Echamos esta mezcla sobre una bandeja de horno con papel vegetal.
La extendemos un poco para que coja forma rectangular.
La horneamos unos diez minutos, cuando empiece a dorarse la sacamos, si no, no podremos enrollarla.
Sobre un trapo húmedo, pero sin quitar el papel donde la hemos horneado, la enrollamos y dejamos enfriar a temperatura ambiente.
Ahora nos ponemos con el relleno, Echamos la nata muy fría en el vaso (tiene que ser de por lo menos 33%)
Por el bocal vamos echando la leche condensada que ya tendremos previamente pesada, despacito, mirando siempre como se monta la nata, que se nos puede convertir en mantequilla, y un chorrito de miel casi al acabar.
Ya está lista, no hace falta que se monte mucho, solo que tenga consistencia cremosa.
Estiramos la plancha del bizcocho ya frío y untamos la crema.
Enrollamos con cuidado, se nos saldrá el relleno al final, no pasa nada lo retiramos y punto. A la nevera, una horita.
Cuando ya esté bien frío, se corta en rodajas no muy finas. Los dos extremos los desechamos ( o nos los comemos, como hice yo). Los ponemos sobre una rejilla con una bandeja o papel debajo para recoger el chocolate que va cayendo.
Los bañamos, estos son los de chocolate con leche, la cobertura es más líquida y cubre mejor. Los tenemos en la nevera un rato hasta que el chocolate se endurezca un poco, una media hora es suficiente. A la media hora, sacamos y damos la vuelta con cuidado, porque estará tierno, pero manejable. Bañamos por el otro lado y de vuelta a la nevera.
Et voilá!! Unos deliciosos phoskitos caseros, o al menos, unos pastelitos de chocolate buenísimos.
El bizcocho queda tierno, tierno, y si os gustan los relleno dulces, os va a encantar.
Q rico! Un buen sistema.
ResponderEliminarGracias Mari Sol! Besos!
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