Tartar de aguacate y langostinos.

  Esta es otra de las sugerencias de mi amiga Susana para publicar en el blog. En realidad, la sugerencia es de su marido, al que esta receta de la página les receptes de Miquel le gusta mucho.

Yo he añadido un poco de tomate a la receta original, creo que le va muy bien y le da más color. El aliño utilizado es muy apropiado para este plato, pero creo que una vinagreta sencilla también le iría bien.

Es un plato ligero, tan solo la salsa le añade calorías pero son tan poquitas que casi ni se notan, asi que si alguien está a dieta, puede darse un caprichito con este aperitivo.

Os dejo la receta tal y como yo la he hecho y os doy varias opciones de presentación.

INGREDIENTES: (PARA DOS PERSONAS)

SALSA:

2 cucharaditas de aceite de oliva virgen.

1 cucharadita de salsa de soja.

1 cucharadita de salsa Worcestershire

1 cucharadita de mayonesa.

Zumo de medio limón.

Sal y pimienta.

TARTAR:

1 tomate.

1 aguacate.

½ cebolla.

6 langostinos cocidos y pelados.

PREPARACIÓN:

Elaboramos la salsa mezclando en un bol todos los ingredientes hasta obtener una salsa homogénea. Probar y sazonar al gusto.

Cortamos el tomate, la cebolla y el aguacate en daditos y los ponemos en un bol con un chorrito de limón.

Troceamos los langostinos, dejando reservados dos para adornar.

Mezclamos las verduras con los langostinos y aderezamos con la salsa, mezclamos bien y dejamos en la nevera un rato para que coja bien los sabores.

A la hora de servir, montarlo con un aro de emplatar o servir en cucharitas, vasos de degustación…

Preparamos primero el aliño, mezclando todos los ingredientes.

Ya tenemos el aliño hecho. Lo probamos y sazonamos a nuestro gusto.

Cortamos todos los ingredientes a dados. 

Los mezclamos en un bol y le añadimos el aliño. Lo removemos para que se empapen bien y lo dejamos en la nevera un rato.

Podemos emplatar con un aro, poniendo dentro todo los ingredientes mezclados.

   Os dejo tres sugerencias de presentación.

   Esta es la más vistosa, colocar los ingredientes por capas y verter el aliño por encima.

  En unos vasitos de degustación, con todos los ingredientes bien mezclados y aliñados. Podemos decorar con un langostino encima.

   O en cucharillas. Estas dos últimas opciones dan mucho juego en una comida con invitados.

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Tarta de crema de leche condensada y chocolate.

   Bueno,  a ver por donde empiezo. Esta tarta no debería llamarse así, debería llamarse "tarta de caramelo y chocolate". Tampoco debería tener este aspecto, pero es que no ha salido como debía.

Vi la tarta de caramelo y chocolate en Julia y sus recetas, pero no me ha salido igual. No sé porqué. He seguido sus pasos. Las únicas variaciones son las cantidades (las doblé para una tarta más grande) y el método, yo usé thermomix.

Por lo demás es lo mismo. Así que me he visto obligada a bautizarla de nuevo y a ir introduciendo cambios en el proceso, a medida que veía que no salía igual.

De todas maneras, la tarta que me ha salido es un lujazo. Que no sea como la de Julia, no significa que no se pueda comer. Al contrario, me la comería entera. Leche condensada y chocolate... menuda mezcla.

Os dejo la receta como yo la he hecho, ya habéis visto mi resultado. Si queréis probar la receta original, dirigíos al enlace que os he puesto más arriba. Igual tenéis más suerte que yo...

INGREDIENTES:

BASE:

300 gr de galletas digestive.

120 gr de mantequilla blanda.

RELLENO:

400 gr de leche condensada.

3 cucharadas de miel.

2 cucharadas de mantequilla.

3 hojas de gelatina

COBERTURA:

150 gr de chocolate negro para fundir.

200 ml de nata para cocinar.

50 gr de mantequilla.

1 cucharadita de maizena.

PREPARACIÓN:

Primero trituramos las galletas 10 segundos a velocidad 5-10.

Añadimos la mantequilla y mezclamos 10 segundos a velocidad 4.

Sacamos esta mezcla y la extendemos sobre un molde desmoldable al que le habremos puesto papel de horno en la base. Metemos en la nevera durante una hora.

Lavamos el vaso y hacemos el relleno. Ponemos la leche condensada, la miel y la mantequilla y programamos 25 minutos, 90º  a velocidad 3.

Unos cinco minutos antes de acabar, ponemos tres hojas de gelatina en agua fría y cuando quede un minuto para acabar la mezcla, escurrimos la gelatina y sin parar la máquina la echamos por el bocal. Dejamos que se integre bien en la mezcla.

Vertemos esta mezcla sobre la base de galletas y dejamos que enfríe un poco antes de meter en la nevera un par de horas como mínimo.

Cuando la tarta haya cuajado bien hacemos la cobertura. Trituramos el chocolate en la thermomix unos cinco segundos  a velocidad 5-10.

Añadimos la nata y la mantequilla y derretimos 2 minutos, 37º, velocidad 2.

Añadimos una cucharadita de maizena y mezclamos 20 segundos a velocidad 3.

Vertemos sobre la tarta y volvemos a meter en la nevera. 

Mejor consumirla de un día para otro.

Preparamos la base. Trituramos las galletas.

Le añadimos la mantequilla y mezclamos.

Extendemos la mezcla en un molde desmoldable. Lo dejamos en la nevera una hora.

Vamos con el relleno. Leche condensada, miel y mantequilla. Cocemos durante veinticinco minutos.

Cuando falte un minuto, echamos por el bocal la gelatina previamente hidratada y escurrida y dejamos que acabe.

Y aquí está la mezcla que debería haber tomado un color dorado, tipo caramelo de café con leche. A mi se me quedó color leche condensada. Tal vez le faltó tiempo de cocción, pero en la receta original tardan diez minutos en conseguir la textura. Yo estuve 25 y nada. Quedó, eso sí, una crema espesa y dulce. 

La vertemos sobre la base de galletas y al frigorífico. Cuaja prontito, Un par de horas.

Ya lista nuestra crema y bien cuajada, vamos a hacer la cobertura.

Trituramos el chocolate negro.

Añadimos la nata y la mantequilla y calentamos para fundir.

Agregamos una cucharadita de maizena. Lo mezclamos bien.

Y lo echamos sobre la crema de leche condensada con cuidado. Ya sabéis, con un cucharón al revés. Dejamos hasta el día siguiente para consumirla.

    Se ven bien las tres capas.

 
  Tiene un corte muy bonito. Y no queda tan dulce como pueda parecer.

    El sabor del chocolate negro, suaviza el dulzor de la leche condensada. Para mi, una delicia.

    Os dejo este cachito para que la probéis y os animéis a hacerla.

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Bizcocho de claras y naranja.

   Para aprovechar unas claras que tenía en la nevera, preparé este bizcocho. Encontré una receta que me gustó en el blog Neus cocinando, pero ella usaba nueve claras y yo solo tenía tres. Así que adapté las cantidades pensando que al llevar menos claras no quedaría tan esponjoso, pero nada de eso, con solo tres claras salió un bizcocho muy esponjoso y suave.

Champiñones rellenos de bacon y queso.

 Veinte minutos es el tiempo que necesitáis para preparar estos champiñones rellenos. Veinte minutos para tener un entrante buenísimo o una guarnición ideal.

Leche merengada de avellanas.

  No estoy segura de en cual libro está esta receta. creo que era "Fácil y divertido". No lo puedo decir con seguridad ya que me la pasó mi amiga Susana el año pasado y desde entonces la he hecho muchas veces.

Es una receta realmente deliciosa. Dulce, helada, con el sabor intenso a avellanas... hay quén dice que les recuerda a las chocolatinas Kinder.

Es muy fácil de hacer con la thermomix y muy rápida, lo único es tener preparados todos los ingredientes ya que algunos no son de uso habitual en una casa.

Probadla y veréis como no exagero nada.

INGREDIENTES:

200 gr de azúcar.

150 gr de avellanas tostadas sin sal.

200 gr de leche evaporada.

80 gr de leche en polvo.

2 claras de huevo.

800 gr de cubitos de hielo industrial.

PREPARACIÓN:

Triturar las avellanas y el azúcar, 10 segundos a velocidad progresiva 5-10.

Añadir los demás ingredientes y programar dos minutos a velocidad progresiva 5-10.

Servir inmediatamente.

Primero trituramos las avellanas con el azúcar. Aunque la receta original pide 150 gr, yo echo el paquete entero de avellanas, unos 200 gr.

Añadimos los demás ingredientes, leche en polvo, claras y leche evaporada, incluidos los cubitos de hielo (se me olvidó hacer la foto con ellos) y trituramos dos minutos.

Nos debe quedar una crema espesa y densa. Servimos inmediatamente. Aunque en una ocasión, congelé lo que sobró y salió un helado riquísimo. Lo normal, es que no sobre nada.

    Tiene una textura tan espesa que casi no se puede tomar con pajita. pero está deliciosa.

     Si os gusta el sabor a avellanas os encantará esta bebida.

   Aquí se ve un poquito la cremosidad de este batido.

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Crema fría de melón.

Sopa de melón o crema de melón mas bien, es lo que os traigo hoy.

Una variante del clásico melón con jamón pero en versión cremosa, porque esta preparación tiene una consistencia espesa, casi como un salmorejo. 

Ligera por los ingredientes que lleva y fresquita, es un entrante estupendo para los días de calor.

No pongo de donde saqué la receta, porque algunas van con nata, otras con yogur, otras llevan aceite, otras no...  y yo he remezclado de un lado y de otro y le he puesto un poquito de leche evaporada para darle textura.

INGREDIENTES:

250 gr de melón.

30  gr de leche evaporada.

Sal y pimienta al gusto.

Una loncha de jamón serrano.

3 cubitos de hielo industrial.

PREPARACIÓN:

Ponemos el jamón entre dos hojas de papel vegetal y lo metemos al micro un minuto en sesiones de 20 segundos para ir viendo como se nos queda crujiente.

Sacamos dejamos enfriar unos segundos y desmenuzamos con las manos.

Cortamos el melón, quitamos las pepitas y lo ponemos en el vaso con la leche evaporada, la sal y la pimienta. Trituramos 1 minuto a velocidad progresiva 5-10.

Añadimos los cubitos de hielo enjuagados y volvemos a triturar 30 segundos a velocidad 5-10.

Servimos inmediatamente con el crujiente de jamón por encima.

Primero vamos a preparar el crujiente de jamón, poniendo entre dos hojas de papel vegetal unas lochas de jamón serrano.

Lo metemos en el microondas unos veinte segundos cada vez, hasta llegar al punto que veamos el jamón crujiente. Algo menos de un minuto.

Cuando lo veáis crujiente lo sacamos.

Se puede desmenuzar con las manos.

Preparamos la crema, todos los ingredientes al vaso y trituramos.

Al acabar añadimos un par de cubitos de hielo industrial y trituramos. Servimos inmediatamente y adornamos con el crujiente de jamón.

    Con estas cantidades salen para dos raciones.

    Es un plato dulce y fresquito, no sé como denominarlo,  si entrante o postre.

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Huevos en corral con judías verdes.

 Esta receta nos la enseñaron en uno de los talleres de verano del año pasado. No la había hecho antes y el otro día mi amiga Susana me la recordó. 

Es muy ligera. la verdura va al vapor y el huevo también. Lo único más calórico es el aliño (por cierto, muy bueno) y aún así he reducido la cantidad de aceite que lleva la receta original.

No sé si la debería considerar una receta de dieta, pero sana y saludable sí.

INGREDIENTES: (para dos personas)

Para el aliño:

1 diente de ajo.

1 cucharadita de sal.

1 cayena (si os gusta picante)

6 almendras crudas sin piel.

50 gr de aceite de oliva virgen.

½ cucharadita de pimentón.

1 cucharada de pan rallado

1 cucharada de vinagre.

Para los huevos en corral:

200 gr de judías verdes.

4 rodajas de calabacín sin pelar.

2 huevos a temperatura ambiente.

Picatostes ( podéis ver como los hago yo caseros en esta receta)

PREPARACIÓN:

Primero preparamos el aliño poniendo en el vaso todos los ingredientes menos el vinagre y programando 4 segundos a velocidad 5.

A continuación sofreímos 3 minutos, varoma, velocidad 2 y cuando falten 20 segundos añadimos la cucharada de vinagre por el bocal. Reservamos la salsa.

Cortamos las judías quitándole los extremos y los hilos laterales y las cortamos por la mitad a lo largo para que nos queden cintas.

Echamos 500 gr de agua en el vaso y programamos 15 minutos, varoma velocidad 1. Colocamos las judías y las rodajas de calabacín en el recipiente varoma y cocemos. Sacamos y reservamos.

Cuando acabe, programamos siete minutos más, varoma y velocidad 1 para que el agua se mantenga caliente  mientras preparamos la bandeja del varoma, poniéndole un trozo de papel de horno mojado y escurrido (lo agujereamos con una brocheta para que entre el vapor) donde colocaremos las rodajas de calabacín y encima las cintas de judías formando como un nido.

Cascamos un huevo sobre cada “corral” y ponemos encima del recipiente varoma tapado durante unos cinco minutos.

Sacamos con una espátula todo junto y regamos con el aliño y decoramos con picatostes.

Primero preparamos el aliño. Ponemos todos los ingredientes del aliño, menos el vinagre y trituramos.

Sofreímos unos minutos y antes de acabar añadimos el vinagre. Reservamos esta salsa.

En el recipiente varoma ponemos las rodajas de calabacín sin pelar y las judías peladas y cortadas a lo largo. las cocemos quince minutos.

Al acabar, sacamos las verduras y sobre la bandeja del varoma, forrada con un papel de horno mojado y agujerado, la vamos colocando. Primero el calabacín.

Luego las judías formando un "corral".

Y por último cascamos un huevo sobre cada uno.

Colocamos la bandeja sobre el varoma, tapamos y dejamos que se cueza unos cinco minutos.

Ya está listo, ¿veis como quedan los huevos?

Con una espátula cogemos por debajo y emplatamos.  

    Regamos con el aliño y ponemos unos picatostes por encima. He de decir que el aliño está de lujo.

    Un plato muy completo, sano y sabroso.

    Como diría Arguiñano: rico y con fundamento.

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