Las naranjas cachorreñas son una variedad amarga de las naranjas de mesa. En Andalucía es muy común ver naranjos cachorreños por las calles, cuajados de flores que en primavera dejan un olor delicioso en el aire.
En Málaga, las naranjas cachorreñas tienen una gran tradición culinaria, son muy famosas en algunos pueblos, (Alcaucín, Nerja...), que las usan para la famosa sopa cachorreña.
En mi colegio hay varios naranjos de estos, se llenan de estas naranjas y cuando se caen los niños las usan para jugar jejeje. Este año hemos decidido hacer talleres de cocina con las naranjas y preparar mermelada casera con ellas. Yo he aprovechado y me he traído unas cuantas a casa para preparar esta mermelada. Me han salido dos botes bien hermosos, uno se lo he regalado a mi amiga Mari Angeles que me regaló dos preciosos tarros de cristal tuneados por ella y yo me he quedado con el otro bote para hacer alguna que otra receta.
INGREDIENTES:
500 gr de naranjas cachorreñas peladas y sin nada de piel
blanca menos una de ellas que lavamos muy bien y dejamos con piel.
Zumo de medio limón
350 gr de azúcar
PREPARACIÓN:
Lavamos y pelamos las
naranjas menos una que dejamos con piel. Yo he usado 3 naranjas peladas y una
sin pelar, en total casi los 500 gramos. Cortamos en cuartos y quitamos las
pepitas si las hay, añadimos el azúcar y trituramos 20 segundos a velocidad
8-10.
Incorporamos el zumo de
limón y programamos 25 minutos, varoma y velocidad 2, sin cubilete y con el
cestillo puesto encima para evitar salpicaduras.
Al acabar vertemos en botes
que habremos esterilizado lavando en el lavavajillas y secando en el horno a
baja temperatura. Yo lo hago así, aunque también se pueden hervir en una olla.
Para echar la mermelada en
los botes tendremos la precaución de dejar una cucharilla dentro para que no
estalle el tarro con el calor. Cerramos muy bien y ponemos boca abajo para que
se haga el vacío.
Esta es una receta que nunca he hecho sin thermomix, para las mermeladas (y muchas más recetas), este aparato es fantástico porque nos evita tener que estar removiendo constantemente los ingredientes. Así que si no tenéis la máquina es proceso es algo mas complejo. Tendremos que pelar las naranjas (menos una) y quitar toda la piel blanca que la recubre. Trituramos junto a la naranja entera a la que le quitamos los bordes superior e inferior, aseguraos que no tienen pepitas. Esta mezcla triturada puede que os quede con grumos ya que una batidora normal no tiene la potencia de la thermomix, pero no os preocupéis porque asi también tiene su encanto. La ponemos a cocer con el azucar y el zumo de limón en una olla alta a fuego medio, siempre removiendo sin parar. Cuando haya pasado un buen rato veremos que comienza a espesar y el azucar se habrá disuelto por completo.Cuando veamos que ya tiene la consistencia de una mermelada apagamos el fuego. Tened en cuenta que al enfriar espesa más, asi que si veis que ya tiene cierta densidad podemos dar por hecho de que está lista.
Como no he hecho nunca mermelada de esta manera, no os puedo decir con seguridad cuanto tiempo se tarda , id mirando sin dejar de remover.
Trituramos las naranjas con el azúcar.
Ya está lista, añadimos el limón y ponemos a cocer.
Al acabar tiene este aspecto.
La vertemos en los botes, pero poned una cucharilla dentro, si no, puede reventarse el cristal del calor
Damos la vuelta a los botes (a mi me salieron dos botes de unos 400 gr cada uno). Dejamos enfriar y conservamos en la nevera. No son como las mermeladas industriales, tenedlo en cuenta, pero aguantan un par de semanas bien cerrada.
Mirad que tarros más bonitos me preparó mi amiga.
Dicen que es la mermelada preferida de los ingleses, la verdad es que el puntito amargo tiene su encanto.
Sale con un color precioso y una textura espesa y maravillosa.
Con esta receta participo en el apastado dulce del reto de febrero de 2016 de Cocineros del Mundo
Me pongo
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