Pan integral

   

  Dicen los entendidos que no hay nada mejor que hacer pan en casa.

   Y desde luego hay quienes hacen pan en casa y son auténticos expertos. Saben sacar partido a sus conocimientos para evitar poner mucha levadura, o usar masa madre...

Yo no soy para nada una buena "panadera" jajaja. Me defiendo con algunas masas mejor que con otras, pero no les llego a la altura de los zapatos...

Hoy me he atrevido a preparar un pan integral. Era un reto propuesto por Marga que dirige el grupo #elpanperfecto.

Cada mes nos propone hacer un pan en el grupo y este mes era pan integral.

No puedo decir que esté perfecto, he preparado una versión integral del famoso "pan milagro" o pan en bolsa de asar.

Un pan que no necesita levado y que se hornea dentro de una bolsa de asar (las podéis encontrar con facilidad en los supermercados).

Es un pan para impacientes jajaja, para aquellos que no aguantan esperar horas de levado. Obviamente, los panes que reposan son mejores, pero este da también muy buen resultado.

INGREDIENTES:

160 ml de agua
10 gr de aceite de oliva
7 gr de levadura fresca de panadería
250 gr de harina de trigo integral
1 cucharadita de sal





PREPARACIÓN:

Ponemos en el vaso de thermomix el agua y el aceite y templamos 3 minutos a 40º y velocidad 1.

Agregamos la levadura desmenuzada y mezclamos 20 segundos a velocidad 3.

Incorporamos la harina y la sal y amasamos 3 minutos a velocidad espiga.

Al acabar, damos forma de bola con las manos, hacemos un corte en cruz y metemos en una bolsa de asar que habremos pulverizado con aceite.

Cerramos con la presilla que traen las bolsas y metemos en el horno, en frío, a 200º unos 30 minutos.

Sacamos con cuidado, cortamos la bolsa, cuidado con el vapor. dejamos enfriar en una rejilla.

Si no tenemos thermomix, templamos el agua y el aceite en el microondas, agregamos la levadura desmenuzada y mezclamos. Añadimos esto a la mezcla de harina y la sal y amasamos hasta tener una masa homogénea. Damos forma de bola y seguimos como se indica mas arriba.



Templamos el agua y el aceite.

Añadimos la levadura desmenuzada y mezclamos.

Agregamos la harina y la sal. Amasamos.

Formamos una bola, hacemos unos cortes.

Y lo metemos en una bolsa pintada de aceite.

Al horno. Se mete en frío. Al rato vereis como se hincha la bolsa.

    Y cuando se enfríe ya está listo para degustar.

    Yo lo congelo en rodajas y así lo tengo listo para el desayuno. 

   

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